Exceso de libertad

Bajo el penoco - El Día
Miércoles, 9 de Diciembre, 2009

El presidente Morales ha dicho que en Bolivia hay exceso de libertad de expresión y por eso –asegura-, no son los políticos los que agreden a los periodistas, sino al revés. Es más, él dice sentirse hostigado y hasta humillado por la prensa. Afortunadamente, la libertad no es un bien que se puede medir en kilos ni en litros y tampoco se pueden hacer regulaciones milimétricas. La libertad no puede ser excesiva ni reducida, no hay medias tintas: o hay libertad o no hay, y en Bolivia aún no se ha dado el paso crucial; sólo existen amenazas. A lo que puede referirse el Primer Mandatario es a los excesos que se cometen en el ejercicio de la libertad y para ello están justamente las leyes, para hacer respetar los derechos de quienes han sido afectados por el abuso de otro. Si el Presidente se siente humillado, hostigado u ofendido por alguna publicación, tiene a su disposición numerosos instrumentos legales para defenderse, pero no se puede cercenar la libertad a nombre de la protección de una investidura. Porque tampoco hay exceso de democracia o cuasi dictaduras. O es democracia o es dictadura, no hay medias tintas.