9.17.2008

La prensa, blanco de la intolerancia

Los trabajadores de la prensa se han convertido en un blanco constante de la violencia que se ha desatado en el país. En La Paz agredieron a trabajadores de la prensa durante una manifestación, en Cochabamba lanzaron un explosivo contra la Red Uno y en Puerto Rico, poblado vecino de Cuatro Cañadas, retuvieron a tres camarógrafos que pretendían hacer tomas nocturnas de un bloqueo. Luego, una comisión de la Federación Sindical de la Prensa y el Defensor del Pueblo vivió momentos tensos ante una multitud en Cuatro Cañadas, que reclamaba a los dirigentes gremiales por la ‘imparcialidad de la prensa oligarca’.

Félix Vargas (Gigavisión), José Ortiz (Unitel) y Humberto Bustillos (Canal 13), los camarógrafos en cuestión, fueron liberados tras 12 horas retenidos. En un acta de la Policía de Cuatro Cañadas consta que no sufrieron daño ni se les decomisó sus equipos.
El líder cívico de San Julián, Félix Martínez, se comprometió a garantizar el trabajo de la prensa en toda la zona de su influencia, pero varios dirigentes campesinos pidieron que algunos medios de prensa sean más imparciales.

Entretanto, los trabajadores de prensa paceños cosecharon agresiones gracias a las críticas del Presidente. Al término de la cumbre de la Unasur, Morales dijo que pedía disculpas a los periodistas extranjeros "porque el 95 % de la prensa boliviana es opositora". Pocas horas después, en La Paz, sectores identificados con su Gobierno protagonizaron varias movilizaciones, una de ellas, el intento de una toma violenta a la Red Unitel.

Las protestas que también fueron convocadas para exigir el encarcelamiento del prefecto de Pando, Leopoldo Fernández, apuntaron al barrio de Miraflores, donde la Policía se desplegó para frenar posibles desmanes e incluso tuvo que recurrir a los gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, que con ruidosos estribillos amenazaron a la redes PAT, Unitel y ATB; así como a las radioemisoras Panamericana y Fides.

Las amenazas se transformaron en agresiones físicas y ataques a los equipos periodísticos en la puerta principal de la Base Aérea de El Alto, donde al menos 100 manifestantes se agolparon con la intención de exteriorizar su repudio al prefecto Fernández. La protesta casi se desborda y fue frenada por la Policía, que, sin embargo, ya no pudo detener las pedradas que recibieron los periodistas que fueron enviados a la cobertura de esos hechos.
Las agresiones se agravaron cuando varios jóvenes de El Alto intentaron desconectar la alimentación eléctrica de las unidades móviles de televisión que se apostaron en el lugar. Un operador de estos equipos de la Red Uno recibió una pedrada, que le provocó una herida sangrante en la frente, según las imágenes captadas por el reportero gráfico de la agencia ANF.

La madrugada de ayer desconocidos lanzaron un artefacto explosivo contra el edificio de la Red Uno de Cochabamba, que buscó anular la antena de transmisión. La explosión provocó un hueco de 25 centímetros en el concreto de la terraza, que da al set principal de este canal. La transmisión de esta estación televisiva continuó con normalidad y su jefe de prensa, Osvaldo Rioja, dijo no temer y que continuarán en su labor.

Caso aparte es el del equipo de prensa de Unitel, en Cobija, zona militarizada, que huyó milagrosamente de una balacera, por encima de la delegada presidencial de Pando, Nancy Texeira. En esta ciudad se ha denunciado censura por parte del Ejército. “Los ataques y acciones contra los medios de comunicación independientes se ha intensificado por parte de sectores afines al Gobierno y se suman a la censura aplicada por militares a periodistas en Cobija”, denunció la Asociación Nacional de la Prensa en un comunicado.

Fuente: El Deber

Entidades nacionales conforman "Plataforma para la NO violencia”

Diversas instituciones nacionales se reunieron hoy en la Fundación UNIR Bolivia para compartir un informe sobre la situación del país preparado por el Programa de Naciones Unidad para el Desarrollo (PNUD) y reflexionar sobre los alcances de la escalada de violencia que vive Bolivia. En la oportunidad y luego de un intercambio de opiniones sobre la necesidad de impulsar espacios desde la sociedad civil que ayuden a despolarizar la coyuntura, se decidió conformar un Comité Ad hoc para la creación de una “Plataforma para la NO violencia”. En esta plataforma, de carácter plural, se invitaría a participar a distintas organizaciones de la sociedad civil, sectores social, ámbito cultural, social, gremial, académico, religioso, y otros, a nivel nacional con el afán de crear instancias de reflexión y de acción destinadas alentar valores de temas como la no violencia.

Son parte de este Comité Ad hoc entidades de la iglesia católica como la Fundación Jubileo y Centro de Promoción del Laicado, representantes de redes y gremios periodísticos y de fotoperiodistas y camarógrafos, el Colegio Nacional de Abogados de Bolivia, artistas y compositores del país, la Fundación UNIR Bolivia y el Programa de Naciones Unidad para el Desarrollo, oficina Bolivia (PNUD)

Las comisiones y sus objetivos

Para esto, como inicial medida, determinaron organizar tres comisiones. La primera, de Solidaridad, apoyará a las regiones y personas víctimas de la violencia, una vez que Ayuda Humanitaria del PNUD haga la cuantificación de los requerimientos de vituallas para los sectores en conflicto, acción que ya está en curso. Desde ya, se informó que la Cruz Roja Boliviana y la Cruz Roja Suiza también están en campaña para apoyar este esfuerzo conjunto.

La segunda comisión, de Información, busca brindar todas las condiciones para una información transparente y plural, por esto organiza una delegación que en una primera instancia visitará Pando para realizar una cobertura en el lugar de los hechos. Se está convocando especialmente a prensa internacional.

La última, de política interinstitucional, busca coordinar acciones con los tomadores de decisión para impulsar la pacificación, el diálogo y la concertación, así como sumar adhesiones a este emprendimiento nacional.

La organizaciones o entidades que quieran sumarse a este esfuerzo conjunto y nacional pueden hacerlo llamando a los teléfonos 71565104 ó el fijo 2117069 – 2153021 ints. 103-104.

9.02.2008

Periodistas de Santa Cruz fueron los más agredidos

Con los objetivos de dar visibilidad pública a los riesgos que enfrenta el ejercicio periodístico en el país y contribuir al debate y reflexión sobre el papel que cumplen los medios de comunicación en la actualidad, el Observatorio Nacional de Medios (ONADEM), se propuso identificar protagonistas, lugares y circunstancias de las agresiones a periodistas y medios registradas desde el 1ro de junio 2007 hasta el 21 de agosto 2008. El trabajo, titulado “Agresiones a periodistas y medios. Insumos para un debate”, se basó en registros periodísticos de los hechos de violencia, así como en entrevistas a dirigentes sindicales y periodistas de todos los departamentos.

De los 117 registros de agresiones- desde el 1º de junio 2007 hasta el 21 de agosto 2008- sólo 16 (13,6%) figuran como denunciados a las instancias policiales y judiciales. En el lapso de tiempo estudiado no se ha conocido ninguna sanción legal a los agresores. Eso implica que los casos de embates, en el lapso estudiado, están dentro de la impunidad. Un ejemplo dramático: el caso del periodista Carlos Quispe Quispe, victimado en Pucarani (La Paz) en marzo 2008 por problemas de índole municipal, luego de cinco meses no se ha tenido avances significativos en la investigación, habiendo pasado el caso ya por tres jueces.

Otro de los hallazgos del trabajo es que el departamento de Santa Cruz registra el 51% de las agresiones a periodistas respecto al total nacional en el lapso estudiado, seguido de La Paz (13%) y Chuquisaca (9%). Cabe destacar que las agresiones que no han sido publicadas y difundidas no están incluidas en el presente trabajo, por lo que es posible que hechos violentos sucedidos en algunas regiones alejadas del “eje central” no hayan podido ser registrados. La agresión más frecuente se refiere a golpiza y/o apedreamiento de los periodistas (46%), en segundo lugar se encuentra la agresión verbal incluyendo amenaza (27%), en tercer lugar está el destrozo de equipos de trabajo o infraestructura de los medios. (10%).

El ONADEM-iniciativa de la Fundación UNIR Bolivia y de la Asociación de Carreras de Comunicación Social ABOCCS, buscó también realizar una aproximación a las “causas” por las que los agresores cometen actos de violencia, en base a los testimonios de los agredidos. La polarización política y mediática, el hecho de no ser del lugar, ser identificado como “perteneciente al otro bando”, ser acusado de tergiversador o sensacionalista, presumir que el periodista está sacando fotos o filmando “para identificar a los participantes en movilizaciones”, son los factores más nombrados.

La conflictividad política presente- de hecho la mayoría de las agresiones sucedieron en cierres de campaña de eventos electorales o en movilizaciones o de marchas de protesta- y la percepción de los medios de comunicación como actores políticos agrava los riesgos para el trabajo periodístico. El trabajo fue realizado por Vania Sandoval e Iblin Herbas, bajo la coordinación de Erick Torrico Villanueva y la colaboración de Francisco Sosa, Osman Patzi y Osvaldo Vargas.

Fuente: Fundación Unir